"VIAJANDO EN EL
TIEMPO"
p o r
C a r l o D o r o f a t t i
Extractos del libro "Viajando en el
Tiempo" por Carlo Dorofatti
http://www.horuscentre.org/Ebooks.htm
CONCEPTOS
FUNDAMENTALES
La
Física Esotérica (Esoteric
Physics)
considera el tiempo como un reino natural.
El tiempo es
secuencial solamente donde existe el espacio y donde hay formas, y
su interacción dinámica. En este caso específico, estamos hablando
acerca de nuestro plano material tridimensional. Fuera del mundo de
las formas, el “flujo” del tiempo – como una secuencia cronológica –
no tiene sentido, y existe en concordancia con diferentes dinámicas
y significados.
El tiempo es el primer efecto de la reunión
de leyes, desde donde nace el mundo de las formas. Dentro del
tiempo, cada forma – desde su primera manifestación y percepción –
determina el comienzo del flujo, donde causa y efecto hacen realidad
el vínculo temporal entre un acontecimiento y otro, dentro de un
plano preciso de existencia.
El universo de formas está
compuesto por muchos planos de existencia, eco-mundos y realidades
paralelas que existen también en dimensiones ultra-luminales.
La complejidad creada por esta visión de nuestro universo
conduce nuestra visión y experimentación hacia diferentes flujos de
tiempo, los cuales interactúan de muchas diferentes formas.
Especialmente desde el punto de vista de la alquimia, el Tiempo es
un parámetro a través del cual consideramos cada forma, que es
apoyada por la “partícula de tiempo” en la cual participa.
Con el nacimiento de la
Física Cuántica,
la física moderna comienza a comprender la infinidad de relaciones
entre las formas, espacio y tiempo, en donde las causas y efectos no
siguen solamente una sola dirección o una secuencia concordando con
nuestro sentido común.
El tiempo es la posibilidad dada a las
formas para transformarse a sí mismas a lo largo del el eje del
flujo temporal, instante por instante, acontecimiento por
acontecimiento, hacia la dirección del desarrollo de la complejidad.
Por ello, solo desde un punto de vista teórico, los tiempos
pasados están relacionados con sistemas menos complejos, y los
tiempos futuros con sistemas más complejos, donde la estructura del
universo está compuesta por masas progresivamente más pequeñas, pero
capaces de manifestar una funcionalidad más amplia, y apoyar un
nivel más alto de información/memoria, dentro de un contexto cada
vez más evolucionado.
Dije “teóricamente” porque, debido a
ciertas razones (relacionadas con la expresión de la “conciencia”),
es posible que el tiempo (el plano de las formas) se desarrolle a sí
mismo de manera no-linear, comparado con la dirección de la
complejidad. En este caso, la secuencia de acontecimientos señala
una intrincada “geografía”.
Básicamente, la física esotérica
considera el tiempo desde dos diferentes puntos de vista: linear y
simultánea.
Nuestra percepción está bastante acostumbrada al
primer punto: es cuestión de considerar el tiempo solo en su función
como un flujo, desde el pasado hasta el futuro. Estamos inmersos en
un río-de-tiempo, y participamos en su constante flujo. Vemos lo que
convencionalmente llamamos “historia”, a través de nuestra memoria
personal, colectiva y convencional, así como nuestra percepción.
Debemos entender que los acontecimientos que van cayendo en la
historia (esta es la relación entre las formas) no se organizan a sí
mismos sobre el eje del flujo del espacio-tiempo de una manera
uniforme, sino que son más intensos, según líneas energéticas
especiales, donde la complejidad incrementa la probabilidad de
manifestarse y desarrollarse a sí misma (líneas de
sincronicidad).
Los acontecimientos se organizan a sí mismos dentro de
secuencias temporales precisas que nosotros llamamos “paquetes de
tiempo”.
Los paquetes de tiempo contienen acontecimientos
(formas), y cada uno de ellos tiene una especie de “validez” de
complejidad. Esta no es la complejidad de los acontecimientos
sostenidos por el paquete, sino la posición angular del todo
respecto al cono de la complejidad. Este parámetro tiende a ser
repetitivo, y sigue una especie de ritmo, de acuerdo con las
características del plano de existencia.
Solamente un
consejo: no espere entender todo perfectamente POR AHORA, ¿si?
Refresque el libro de introducción acerca de la Física Esotérica y…
siga adelante.
De un paquete temporal a otro, la complejidad
sigue diferentes flujos de evolución y crea un ritmo.
Podemos
pensar en cada plano de existencia como una sinfonía, una música que
tiene un ritmo preciso. Los paquetes del tiempo con el mismo valor
se las arreglarán a lo largo del flujo del tiempo, según este ritmo
en particular.
Use otros sentidos, y no solo su mente
racional para visualizar y entender este mecanismo.
Los
paquetes de tiempo en el pasado ya están bien definidos en su nivel
de saturación de acontecimientos, y su estructura es “suave” debido
a la presencia de un mesurable número de acontecimientos
no-saturados y de eventos de los cuales nosotros podemos definir el
nivel de saturación, por lo que pueden ser re-saturados a través de
acciones a un nivel más alto de complejidad.
Esto crea
también la posibilidad para que la masa sea manejada durante
operaciones de saltos de tiempo físico. Por esta razón, como lo
vamos a explicar más adelante, viajar al remoto pasado es más fácil
que viajar cerca de nuestro presente, donde la estructura de los
acontecimientos no está todavía completamente definida, y por esta
razón, es menos manejable (a menos que se invierta una gran cantidad
de energía).
Cada paquete de tiempo dura alrededor de 66-70
años. Esta duración tiende a disminuir lentamente con el crecimiento
de la complejidad.
La segunda concepción del tiempo está
basada en un punto de observación fuera-de-tiempo (fuera del mundo
material de formas y fuera del tiempo mismo). Desde esta posición
podemos observar todo el río, desde la fuente hasta la
desembocadura, e incluso todos los demás ríos posibles.
El
pasado y el futuro no existen ya: solo el presente. Cada
acontecimiento está presente y todos los acontecimientos son
simultáneos. Están allí afuera, definiendo una especie de geografía
temporal. Todo el universo, todas las posibilidades de manifestación
de las formas y todos los acontecimientos están presentes en lo que
llamamos “el mar del tiempo”.
En este mar, cada evento es
sostenido por una fracción temporal indistinguible, y causa y efecto
no tienen significado en absoluto, a menos que consideremos una
secuencia determinada (mundo, plano de existencia) el cual obtiene
su propia dirección en relación con la percepción y su geometría
(posición en el panorama general) en relación con la dirección
general de la complejidad universal.
Esta visión del tiempo
nos conduce al concepto de “geografía temporal”: el universo no es
un territorio espacial, sino más bien un ambiente temporal.
Dentro del eterno presente, cada objeto no es nada sino virtual e
imaginable, en cualquier clase de su posible manifestación, dentro
de las dimensiones materiales.
Es un mundo pre-cuántico. Este
es el “mundo de las ideas”, el papel del tiempo en el cual todas las
leyes que crean el universo entrelazan sus relaciones y firman aquel
“acuerdo” (armisticio universal) del cual todas las posibles
dimensiones, mundos y planos de existencia nacen y se manifiestan.
Las “ideas” se volverán “números” y finalmente formas,
desarrollándose a sí mismas a través de campos y radios de leyes,
algunas, incluso, muy diferentes, pero siempre coherentes, con el
acuerdo constituido (el armisticio primitivo de leyes universales).
Si usted quiere entender mejor estas dinámicas de creación,
entonces por favor lea el libro electrónico que se refiere a las
Físicas Esotéricas (Esoteric
Physics).
Cada posible mundo es simultáneo y coexiste con todos los otros,
pero se distingue a sí mismo por su particular campo de sub-leyes
locales.
Continuamente “presente” está el punto de encuentro
de las leyes universales en esa versión particular, la cual es
adecuada para el mundo preciso que estamos considerando.
Por
favor, siempre recuerde que cada aspecto de la realidad está
definido y literalmente “toma forma” de acuerdo con la naturaleza
del observador (por supuesto que hay muchos niveles de observadores
que se sintonizan a sí mismos a un nivel diferente de la realidad.)
De hecho, el punto central de la investigación científica es el
investigador mismo. El ser humano es el centro, el espejo, el
reflejo y la única medida posible de su realidad. Este es el punto
de comienzo: la objetividad no existe y la moderna física cuántica
puede diariamente verificar y confirmar esto.
El ser humano
es un instrumento único de percepción existente: todos los otros
instrumentos nos proporcionan información, la cual es siempre
procesada, interpretada y evaluada por el ser humano quien, a su
vez, les da un significado más o menos complejo y completo.
Nuestra percepción mantiene los acontecimientos y formas dentro de
la existencia y extrae de ellos un valor espiritual holístico. Este
valor agregado apoya – más o menos – nuestra realidad como una
posible expresión del Ser Absoluto.
El viaje en el tiempo
consiste en la posibilidad de moverse a lo largo de la “historia”,
respetando leyes precisas con relación a la dinámica de la
complejidad, y saltando en contra del tiempo, dentro de los ritmos
de las posibles secuencias temporales, y deslizándose más allá de
las alas teatrales de la realidad, para poder modificar
acontecimientos y efectos.
Básicamente, desde un punto de
vista teórico, nosotros podemos considerar tres principales maneras
de hacer esto: a través de la reencarnación (cada uno de nosotros lo
hace de una manera más o menos consciente), por posesión sutil o a
través del desplazamiento físico.
Es una cuestión de “salir”
del tiempo y localizarse uno de nuevo dentro de el, siguiendo
trayectorias precisas y geometrías multi-dimensionales. Esto es
posible usando el poder vinculado con su propio nivel de conciencia
o mediante la “mágica” tecnología adecuada (siempre en el contexto
apropiado).
Por ejemplo, la operación de “posesión” es la
posibilidad de viajar a través del tiempo con sus cuerpos sutiles,
para poseer a otro cuerpo (animal o humano) en el lugar de destino.
En este caso, no es su parte física la que se desplaza, sino su
parte sutil: el “quantum de complejidad” (nudo de complejidad), el
cual está en proporción con su forma e individualidad en su vida
actual.
Puesto que su parte sutil no puede desunirse de su
cuerpo físico (usted todavía está encarnado y vivo), debe mantenerse
siempre un canal abierto entre los dos lugares (su punto de partida
y su destino). Esta operación requiere mucha energía y pudiera tener
un límite de distancia. De todos modos, la ventaja para el
“tiemponauta” es ser capaz de “usar” un cuerpo que ya esté adaptado
al ambiente o, en caso de posesión de animales, de patrullar el
hábitat con sentidos más poderosos.
El viaje físico
es la transferencia de la información (código) de la estructura
física, energética y espiritual del tiemponauta.
Según este
código de complejidad (y ajustando los niveles de gravedad del
cuerpo respecto al contexto temporal en el que el – o ella – serán
ubicados), puede hacerse el re-ensamblamiento físico en el tiempo de
destino.
Vamos a profundizar este mecanismo.
Desde el
punto de vista de la Magia, el tiempo no existe: son Formas que
están continuamente cambiando (como eventos de pulsaciones de
energía). Yo ya dije que la física esotérica considera el tiempo
desde por lo menos dos principales puntos de vista: como una
secuencia de acontecimientos (vinculados a la la ley de
causa-efecto) y como un “territorio” donde todos los acontecimientos
están presentes e independientes.
En el primer caso, la idea
del pasado y del futuro colocados en en un plano mono-direccional de
existencia prevalece, pero en el segundo caso hay solamente un
eterno presente, en el cual pueden escurrirse infinitas secuencias
posibles.
Partiendo desde ambos conceptos, podemos elaborar
complejas teorías (y experimentaciones) acerca de viajes en el
tiempo y espacio. Es importante recordar que el tiempo, como por el
primer concepto, no es más que una lectura” sensorial” de la
transformación de las formas: causa y efecto son solamente una
justificación (una convención) relacionada con nuestra restringida y
relativa percepción de la realidad.
El Tiempo y el Espacio no
pueden ser tomados como puntos pasivos de referencia, que son fijos
e inmutables, sino que, según las físicas modernas, y con todas las
enseñanzas esotéricas tradicionales, también tienen que ser
considerados como parte integrante de una realidad dinámica y
activa. Ellos son los protagonistas, y parte de una multiplicidad
integrada, y son sujetos activos del cambio y evolución.
La
idea de un eterno presente nos conduce a una perspectiva que está
fuera del flujo temporal, y que nos ofrece una inmediata, simultánea
y total percepción de la “esfera”, conteniendo, – a diferentes
profundidades, – todos los acontecimientos posibles en todos los
tiempos posibles.
Este es el gran depósito llamado “el Mundo
de las Ideas”, que potencialmente y virtualmente contiene todas las
posibles manifestaciones de formas dentro de los límites del
primitivo “armisticio” de Leyes (singularidad universal).

World of Ideas =
Mundo de las Ideas
Eternal Present = Eterno Presente
Past =
Pasado
Present = Presente
Future = Futuro
El Universo en
un campo de leyes.
La Física Esotérica dice que el Universo
de Formas es una singularidad, una onda anómala que causa el
encuentro de funciones precisas del ser (leyes). Esas Leyes
encuentran una “relación” balanceada, creando un campo de fuerza:
nuestro Universo, el Concepto prístino desde donde son generadas
todas las Dimensiones y el Tiempo. Mantenga en mente que estoy
usando el tiempo presente.
También podemos imaginar que la
Mente Divina crea las Ideas que luego se convierten en números, y
finalmente en Acontecimientos/Formas, en diferentes posibles
espacio-tiempos.
Las formas se manifiestan como estructuras
perceptibles (tiempo, espacio, masa, energía) y crean una posible
dimensión (mundo): esta es una dirección temporal.
Recuerde
que todos los “mundos paralelos” de nuestro Universo están
distribuidos en diferentes frecuencias simultáneas y dimensiones. En
cada dimensión de formas hay leyes locales particulares, que se
derivan del acuerdo prístino universal, pero funcionan según
diferentes “proporciones locales”.
Es importante mantener en
mente que los mundos paralelos son todos esos planos de existencia
que co-existen espacial y temporalmente con el nuestro. De hecho,
las mismas estructuras del Universo son una compenetración de mundos
con diferentes ritmos y equilibrios.
Su diferente
“frecuencia” los mantiene como separados y representa la matriz de
la estructura de sus formas. Desde el punto de vista esotérico,
usando el conocimiento apropiado, energía y poder, es posible poner
en relación diferentes mundos. Es más, en circunstancias
particulares es posible abrir “puertas” y, en el tiempo preciso, ir
a través de ellas para alcanzar diferentes dimensiones de la
realidad.
La dirección temporal es el convenio a través del
cual es posible medir el cambio y la evolución causadas por la
interacción entre múltiples y diferentes formas temporales. El
vínculo de causa y efecto es solamente una necesidad interpretativa,
la cual es creada por la percepción y el significado que le damos a
la realidad.
De esta forma, nosotros definimos la secuencia
histórica, el sentido de lectura y el horizonte de acontecimientos,
que es la dirección del futuro.

Arrow of Complexity
= Flecha de Complejidad
World = Mundo
La “memoria” crea
la convención causal de la realidad pasada.
La dirección
temporal está vinculada a la “densidad temporal” y a proporciones
gravitacionales.
Básicamente, el
“Universo de Formas” asume tres características fundamentales, que
son la estructura de apoyo de todos y cada uno de los mundos
manifestados: multiplicidad, diversidad y dinamismo.
Las
formas pueden expresarse a sí mismas a través de varias estructuras
de leyes diversificadas (generando diferentes dimensiones y mundos
paralelos) hacia una dirección común: la flecha de la complejidad.

Real = Real
Threshold = Umbral
Forms = Formas
Worlds = Mundos
El objetivo de las
formas es crear “valor agregado”: el resultado global debe
representar un “todo”, que es superior a la suma de las partes.
Este resultado es creado por la creciente “complejidad” del
sistema que agrega valor al sistema mismo, el cual, idealmente,
debería ser racionalizado y optimizado sin agregar masa, pero por
medio de incrementar la intensidad de la
relación/información/significado. La “dirección de complejidad”
conduce a todo el sistema a un “punto omega” más allá del cual es
proyectado fuera del mismo Universo. Esto ocurre continuamente, a
través de flujos de complejidad exhalados del Universo y de todos
sus posibles planos de existencia.
Cada mundo de formas
tiene tres parámetros principales “locales” que lo constituyen:
dirección temporal, densidad perceptible y nivel/número de
dimensiones.
Dentro de cada mundo, las matrices de la
realidad funcionan de una manera específica y exclusiva. El código
de función de las leyes – dentro de una dirección temporal
específica (mundo) – se da por lo que nosotros hemos llamado
“matrices temporales”. Podemos decir que toda la Magia – desde su
punto de vista más técnico – es cuestión de saber y usar estas
matrices. Esta es la parte superior de todas las ciencias posibles.
Direcciones y velocidades de mundos son diferentes y, en cada
mundo, la complejidad asume una expresión específica y resultado.
Los mundos trabajan juntos para alcanzar ese resultado global de
complejidad, el cual apoyará la existencia de todo el Universo. El
valor agregado es un resultado holístico en el cual podríamos
encontrar los significados pasados que se ensamblarán con una
Conciencia superior.

Parallel Worlds =
Mundos Paralelos
Arrow of Complexity = Flecha de Complejidad
Durante el camino
evolutivo de cada mundo, las formas se organizan idealmente
siguiendo lo que llamamos “la ley de cuartos” (forma, vida,
pensamiento, divinidad) y tienden a lograr el mínimo resultado de
complejidad necesario (percepción, significados. Valor agregado)
para apoyar su propia existencia, involucrando menos y menos materia
(masa/energía) y creando más y más fluidamente niveles de
relaciones.
Por lo tanto, para representar la dirección
evolutiva del Universo, la física esotérica describe su desarrollo
ideal como dividido por cuatro momentos cruciales:
-
la expresión de
la materia en su estado mineral
-
el nacimiento de
la vida (este es un concepto mucho más amplio de lo que
considera la biología terrestre)
-
el nacimiento y
la evolución del pensamiento (filosofía, cultura, arte…)
-
y el proceso para
el cual las formas de pensamiento más simples dan lugar al
concepto de lo “divino”

MASS= Masa
Complexity = Complejidad
Progresivamente, vemos un
proceso estructuración del universo material cada vez más funcional:
la masa se organiza cada vez más, y las relaciones entre las formas,
se optimizan cada vez más – gradualmente comprenden las funciones
superiores y sus significados.
La complejidad lograda en cada “cuarto”
es agregada a la complejidad estabilizada en el cuarto anterior. La
compleja interacción entre las formas crea un valor agregado, para
involucrar al universo en un proceso anti-entrópico y holístico que
llamamos “flecha de complejidad”.
La expresión más alta del
último estado evolutivo corresponde al máximo nivel de complejidad,
que puede mantenerse en existencia sin ninguna ayuda de las formas
(materia, masa/energía): el significado entero del universo supera
al universo mismo y se proyecta a sí mismo más allá de los límites
de la materialidad.
Como seres humanos, en este planeta,
somos una expresión transitoria de la vida entre el tercer y el
cuarto trimestre. Potencialmente somos “formas-de-puente”.
Debido
al papel que las formas-de-puente tienen con el poder de su libre
voluntad, desde cierto punto en adelante, no podemos dar por sentada
ninguna correspondencia automática entre el flujo del tiempo y el
crecimiento de la complejidad.
Por lo tanto, vemos el
desarrollo de una compleja geografía sacada por todas la líneas del
tiempo que se mueven en función del “cono” de la complejidad, donde
el “futuro” no está siempre orientado hacia una posición de
complejidad más alta.
Los mundos de formas se llaman
“paralelos” porque están estructurados según diversas proporciones o
cocientes de leyes, y vibran en diversas frecuencias.
Si nos
imaginamos nuestro Universo como un todo o un entero integrado de
mundos, entonces podemos ver que todos esos mundos son simultáneos,
compartiendo el mismo “espacio” y distribuidos en diversas
dimensiones.
Independientemente de la secuencia temporal
convencional interior, la dirección de complejidad es la única
orientación común, verdadera e ideal, hacia la cual tienden a ir
todos los mundos – cada uno siguiendo su propio camino, y de la cual
depende la existencia del sistema entero.
Cada mundo tiene su
propio “umbral relativo” el cual realmente está combinado con todos
los otros umbrales en un ambiente común, donde todas las direcciones
temporales se nulifican a sí mismas.
El umbral también hace
juego con el tradicional concepto del “inframundo”.

El Universo de Formas no está en contacto
directo con “el Verdadero”, el cual lo contiene. Está envuelto por
una especie de “aura” que nosotros llamamos “Umbral”.
El
Umbral es un estado de ser que no necesita formas para apoyarse.
Recoge los resultados de la complejidad que todavía no están
completos (por lo cual no pueden combinarse con lo Verdadero y deben
ser proyectados de nuevo en el proceso de las formas – en nuestro
nivel humano; nosotros llamamos este mecanismo “reencarnación”).
En el umbral podemos localizar el “centro de masa” de la parte
principal de las entidades y de las fuerzas divinas que componen
nuestro ecosistema espiritual. Están más o menos cerca de la Forma
(desde donde obtienen su alimento energético) o de lo Verdadero,
según su nivel de complejidad y del sentido espiritual y de
conciencia.
El Umbral se rige por leyes prístinas, pero en
ciertos casos, casi es posible crear campos particulares de leyes
derivadas (por ejemplo, la “Ciudadela Iniciática”, que es la
dimensión iniciática post-mortem).
A través del Umbral, es
posible ponerse en contacto y acceder todos los otros mundos
posibles (relacionados con nuestro universo).
El Umbral es
contactable usando el Sentido del Sueño, a través de muchas diversas
técnicas fuera-del-cuerpo (proyección astral, viaje chamánico, o
métodos más complejos con respecto a la supuesta demonizada “visita
al
Aethyrs”,
la cual está relacionada con avanzadas enseñanzas Enoquianas y
Telémicas).

Puesto que es un
estado de Ser que está relacionado con todos los mundos, fundados
por leyes prístinas, el umbral es una especie de “lugar-
de-no-lugar”, donde podemos encontrar todos los cursos y las puertas
para movernos de un mundo a otro, pero también, – al mismo tiempo, –
a través de nuestras dimensiones psíquicas interiores y estados de
conciencia.
El viaje a un diferente mundo paralelo (de forma
que no solo a través de diferentes mundos-eco de nuestro plano) es
posible solamente por medio de la desestructurización de nuestro
propio código de leyes, derritiéndonos con las leyes prístinas y
estructurándonos de nuevo según las leyes del mundo que alcanzamos.
Esto involucra un cambio en la dirección temporal, densidad y
dimensiones, así como también de nuestros paradigmas sensoriales.
Cada mundo está compuesto por muchos diversos planos posibles de
existencia. Estos planos de existencia se reducen – por la
percepción de las varias especies – a una referencia principal de la
realidad. Es una convención basada en el ejercicio de los sentidos,
del pensamiento y de la memoria.
Nosotros llamamos “mundos
eco” a todas aquellas realidades que no han sido condensadas en el
plano principal. Estas realidades están justificadas o quitadas de
nuestra realidad por nuestra mente y, para nosotros, no existen en
absoluto.
De hecho, cada vez que hacemos una elección, más o
menos a sabiendas, esos efectos, que habrían sido la consecuencia de
las opciones alternativas descartadas, flanquean un mundo temporal
paralelo (mundo eco), que pronto será absorbido por la realidad
principal elaborada por nuestros procesos mentales y sensoriales.
Esto significa que los mundos eco están siendo generados
continuamente. Según nuestra naturaleza actual, no somos realmente
“estables” y cada uno de nosotros fluctúa en diferentes eco-planos,
que, no obstante, son traídos de regreso al principal, por el
mecanismo de nuestra memoria. De hecho, nuestra mente
(percepción-interpretación-memoria) construye continuamente el plano
más significativo, o por lo menos, contenible –en el que convergen
todos los demás.
La realidad es mucho más compleja y más
amplia de lo que nuestros sentidos nos hacen creer.
Nuestro
plano de existencia es solo nuestra realidad tridimensional, que es
el resultado de la reunión entre nuestro mundo y los sentidos que
aplicamos a él, los cuales han estado desarrollándose por medio de
adaptación y procesos culturales.
Realmente, la realidad a la
cual podríamos tener acceso – debido a nuestra naturaleza verdadera
– debería ser bastante amplia, pero por el momento, en este planeta,
nuestra especie ha sido afectada por pesadas restricciones
sensoriales y ha perdido muchos “arquetipos” (matrices existenciales
y cognoscitivas), encontrándose como “lobotomizadas” y en una
condición de peligrosa carencia de conciencia (valor agregado), lo
cual afecta la densidad de nuestra realidad misma.
Aparentemente ya no somos capaces de intervenir en el campo quántico
de las realidades potenciales.
Existen diversos niveles de la
verdad: en general, podemos decir que todo depende en lo que
pensamos que es real. Vivimos en un mundo donde todo lo que vemos es
solamente la punta de un iceberg de “mecánica quántica”. Las cosas
no son hechas por “cosas”, sino por ideas, conceptos e información.
Determinamos la realidad en la cual estamos y aquello que vemos: no
hay nada “allá afuera” que no sea afectado por lo que está dentro de
nosotros.
Cada “cosa” no es más que un posible movimiento de
nuestra conciencia, y momento a momento, somos nosotros quienes
decidimos cual movimiento llevaremos a la realidad.
Todas las
realidades existen simultáneamente. Las cosas son solamente
tendencias ce la conciencia.
Por lo tanto: nuestra
influencia sobre la realidad es absoluta. Somos “máquinas” que
producen realidades. El “iluminamiento” es la completa y verdadera
comprensión, experiencia y maestría de eso.
Usted tiene que
perseguir el conocimiento a través de la perspectiva correcta y
enfoque correcto, sin ninguna interferencia de nuestras dependencias
e ideas preconcebidas. Si usted aprende a hacer eso, entonces
conocerá la realidad tal como es, y sus cuerpos tendrán una nueva
experiencia en eso, con una nueva química, nuevos hologramas, nuevo
lugar de pensamiento y nuevos sueños.
Es solamente en
nuestra actual experiencia ilusoria de la realidad la que nos hace
parecer como si nos moviéramos a través del tiempo. Esta es una
ilusión, así como cuando pensamos que el espacio está vacío y que la
materia es sólida. De hecho, es exactamente lo contrario.
Debido a la
manera en la cual está estructurado nuestro cerebro podemos ver
solamente lo que creemos que es posible. Nosotros concordamos con
los esquemas que ya existen dentro de nosotros, debido al
acondicionamiento que recibimos.
Nuestra conciencia
influencia a otros a nuestro alrededor, las características de
nuestro mundo material, así como el futuro.
Estamos
continuamente co-creando nuestra realidad pasada, presente y futura.
Nuestra percepción actual está basada en un tiempo mínimo,
en el cual es necesario registrar la transformación del nivel de
complejidad de formas. Nuestro “presente” dura aproximadamente 4
segundos. En promedio, este es el tiempo que necesitamos para poder
elaborar nuestra percepción sensorial.
Por el momento, en
esta época, el ser humano no es capaz de utilizar en tiempo-real la
elaboración del pensamiento que se procesa en esos 4 segundos. Por
lo tanto, nuestra mente tiene el tiempo para redefinir la realidad
según una convención aceptable, que sea conveniente con nuestros
sentidos (limitados) y con nuestro esquema mental. De esta manera,
nuestra mente establece nuestro principal plano de realidad, y
nuestra memoria convencional establece el plano histórico: el
paradigma de causa-efecto.
Nosotros siempre percibimos cosas
solamente después de que han sido reflejadas en el espejo de nuestra
memoria: de hecho, el cerebro no conoce la diferencia entre lo que
es visto y lo que se recuerda.
Todos estos elementos son
fundamentales para comenzar realmente a entender lo que es el viaje
en el tiempo.
Según las enseñanzas de física esotérica
presentadas en nuestro libro de introducción (el cual yo siempre
recomiendo leer antes de ir a través de las teorías de la física
temporal), el “Pensamiento” no es un producto de nuestra mente, sino
una sustancia en la cual todos los seres están sumergidos. Por ello,
nosotros, así como todos los otros seres en diferentes niveles, no
producimos ningún pensamiento, sino que solamente procesamos esta
sustancia-matriz. Este valor agregado – que permite que exista
nuestro universo - debería ser el resultado final del pensamiento
global.
En nuestro actual estado de, nosotros no producimos
pensamiento y ni siquiera no somos capaces de utilizar el resultado
de nuestro proceso en tiempo-real.
En el momento en el que
cada uno de nosotros presume pensar (o mejor procesar y dar una
forma de frecuencia a la sustancia del pensamiento), realmente está
solo recordando una dinámica que ya ha ocurrido. Esto tiene
importantes implicaciones desde el punto de vista de la fisica
espriritual.
Por otra parte, tenemos que considerar que el
pensamiento no es uniforme en el universo (hay diferentes flujos) y
la sustancia que nos alcanza ya ha sido procesada por otros niveles
de complejidad, otras criaturas y fuerzas. Nosotros, a la vez,
procesamos y proyectamos nuestro pensamiento procesado hacia
diferentes criaturas existentes en un nivel más alto. El resultado
final regresa al origen y apoya todo el sistema.
La Magia
dice que los actuales seres humanos procesan y recuerdan el
pensamiento, pero, idealmente, los seres humanos completos y las
divinidades lo usan e incluso lo crean, y crean cosas y realidades.
Evidentemente, nuestra realidad es una ilusión, pero este es
también el plano de leyes que rigen nuestra existencia, y en el cual
vivimos para poder actuar, tomar decisiones, dar significados y,
proporcionalmente, producir complejidad y “valor agregado”.
Cuando una especie compleja percibe formas, crea su propia
convención temporal. Por ejemplo, las divinidades territoriales, en
su nivel, “ratifican” la complejidad de una secuencia de realidad,
definiendo lo que llamamos “paquetes temporales”, aproximadamente
cada 66/70 años (momentos de “atención divina”).
El Continuo
de tiempo, como secuencia, no se desarrolla a sí mismo solamente a
través de acontecimientos que están vinculados entre sí por la ley
de causa-efecto, sino que son las estructuras en sí, en aglomerados
precisos de acontecimientos/formas los que son llamados “paquetes
temporales”.
Los Paquetes temporales sostienen las formas
que están organizadas en el plano temporal, siguiendo un criterio
preciso. Diferentes paquetes vienen uno después del otro, espaciados
por un ritmo determinado, para cada uno de ellos, en un promedio que
dura unos 66/70 años. Este valor tiende a decrecer con el aumento de
la complejidad.
El vínculo de causa-efecto no funciona con
los acontecimientos que pertenecen a diferentes paquetes temporales,
mientras los paquetes estén lo suficientemente espaciados entre sí.
Cuando un paquete termina y comienza el otro, hay un momento en
particular llamado “momento de atención divina”.
Es un micro-ritmo,
que es parte de aquellos ritmos más amplios, como los supuestamente
denominados “Eones”, los cuales duran aproximadamente dos mil años.
Las divinidades fijan la realidad, y se hacen un cuadro del estado
de los acontecimientos. Este escenario histórico puede ser cambiado,
no solo viajando a través del tiempo, sino que también usando un
alto nivel de tecnología temporal y magia teúrgica.
Los
paquetes de tiempo contienen formas de acontecimientos que han sido
saturadas en el nivel preciso, según la complejidad del sistema al
cual pertenecen.

Comencemos diciendo que, moverse y actuar
a través del tiempo, está basado en el hecho de que hay una
diferencia, un margen de complejidad, que permite a un ser más
evolucionado saturar otra vez acontecimientos menos complejos, en un
nivel superior de acción, poniendo en discusión la realidad
histórica del plano principal.
Este “ser” (el tiemponauta) se
mueve a través del fino tejido de la realidad, a fin de reajustarla
y modificarla, siguiendo coherentemente caminos precisos con el
ritmo de los paquetes temporales. De esta manera, él o ella pueden
acceder y re-saturar los acontecimientos en contra del tiempo,
gracias a su importante complejidad. La realidad alternativa se
desarrolla a si misma en un mundo-eco del plano principal Este mundo
eco puede, de diversas maneras, interferir con el plano principal en
sí mismo, aunque esté separado de él y siga una pista diferente.
Desde el punto de vista del esoterismo, el viaje en el tiempo es
una práctica que es (y ha sido) experimentada y usada por muchas
diferentes Escuelas y Órdenes, usando diversos conceptos, sistemas y
disciplinas.
Esta extraordinaria experiencia no es solo una
cuestión de “visión” (como la clarividencia o al adivinación), sino
que considera la posibilidad de moverse físicamente a través del
territorio del tiempo, y actuar en los acontecimientos históricos.
Este recorrido puede hacerse siguiendo diversas maneras:
reencarnación planificada, viaje sutil o chamánico, viaje astral en
el tiempo y posesión de un cuerpo, así como la entrada y salida
física del viaje con su propio cuerpo.
El viaje en el tiempo
se puede hacer usando “puertas”
naturales especiales, que
permiten acceder a los túneles temporales particulares (técnicamente
llamados “agujeros de gusano”) o usando una tecnología capaz de
abrir o incluso crear puertas temporales y caminos adecuados.
La física esotérica estudia la teoría y la práctica del
recorrido del tiempo, que, no obstante, debe ser considerado como
parte de una investigación más amplia, que investiga las leyes y las
dinámicas físicas y espirituales de nuestro universo.
Todos
nosotros hemos estado viajando en el tiempo: estamos haciendo eso
exactamente en este preciso momento, trasladándonos hacia el
siguiente momento. Este es un recorrido linear hacia el futuro que
experimentamos según nuestro “ritmo”.
Pero si usted
quiere moverse a través del tiempo, saltando de un punto a otro,
entonces solo podrá moverse hacia una complejidad inferior (puesto
que “usted” ya ha estado allí) y no hacia sistemas de complejidad
que son más altos que el suyo, o que el sistema de realidad de la
cual usted normalmente es parte, porque esto puede ser alcanzado
solamente viviendo instante por instante linear (y no saltando).
Si asumimos que el nivel inferior de la complejidad está
relacionado con el tiempo pasado, lo que se ha dicho anteriormente
significa que el viaje en el tiempo (que no es una carrera, sino un
salto) es posible solamente hacia el pasado, que es accesible porque
– en teoría – es menos complejo.
En cualquier caso, el viaje
hacia el futuro no podría ser posible (desde un presente absoluto)
porque no hay ningún tiempo futuro que esté ya estructurado, sino
solo futuros virtuales hipotéticos de los cuales eventualmente
podría ser posible solo una proyección de la mente, y no un cambio
físico.
La posibilidad de causar cambios históricos puede
alcanzarse por medio de:
-
detonando
acontecimientos claves autosuficientes
-
interviniendo en
los acontecimientos de compensación que tienden a
desarrollarse en el plano principal, para absorber la
interferencia
-
importando
directamente efectos del pasado hacia el presente, a través
de una ramificación lateral temporal
-
apoyando la
realidad alternativa (en este caso, el tiemponauta sigue
participando en ella – este es el caso típico del viaje por
medio de la reencarnación)
Con respecto a viajes por medio de
reencarnación, éstos generan un fenómeno particular llamado
“separacion de planos”.
El tiempo pasado, en el plano humano
de existencia en el planeta Tierra, está orientado hacia una
dirección que pronto será intolerable. Esto es debido a muchos
diversos niveles de causas: contaminación biológica, industrial y
nuclear del ambiente, manipulaciones genéticas incontroladas y, por
supuesto, la creciente degradación de los valores espirituales.
La supuestamente denominada “Nueva Era” – que potencialmente
debería crear oportunidades evolutivas para la conciencia del ser
humano – debe ser apoyada a través de decisiones y acciones
precisas.
Pero la constricción progresiva de los sentidos y
de la mente hace que estas acciones sean cada vez más difíciles y
extraordinarias. No obstante, las condiciones astronómicas y
energéticas en nuestro planeta se adaptan realmente o se sintonizan
con nuevas posibilidades, puesto que el planeta mismo ha entrado a
un nuevo estado dimensional, que mucha gente resume en el concepto
de la “Edad de Acuario” (o “Eón de Horus-Maat”). Esta es una nueva
secuencia de la posible realidad, que está progresivamente orientada
a nuestro plano principal, y promueve potencialmente nuevos
paradigmas espirituales, culturales, sociales y políticos.
El
comienzo de esta fase evolutiva (de la cual el disparador sigue
estando aún en proceso y se desarrolla a través de muchos pasos)
debe ser situada en 1904 y, según diferentes tradiciones, podría
cumplirse alrededor del
2012
(el “punto cero”) con el cierre final de un ciclo y la apertura de
un nuevo curso existencial.
Recientemente, ha estado
desarrollándose una “separación de planos” en esta nueva pista de la
realidad humana terrestre: es causada por una interferencia exacta
para re-orientar la realidad.
Esta acción es insidiosamente
llevada a cabo por “fuerzas encarnadas” viniendo desde el futuro, o
desde otras dimensiones, con el fin de interceptar y cambiar
acontecimientos naturales, para asegurarse de que nuestro planeta
Tierra – y la humanidad terrestre – sean permanentemente excluidos
de cualquier avance espiritual concreto que crea potencialmente la
Era de Acuario. Esto no significa que quieran la destrucción total:
por el contrario, ellos trabajan para que nuestro planeta pueda ser
salvado o solo porque necesitan esclavitud humana. Y esta gente a
menudo se presentan a sí mismos y habla como profetas o pioneros de
la misma Edad de Acuario.
Por ello, la humanidad está
todavía viviendo en un plano existencial que es real y virtual al
mismo tiempo.
La tarea de las varias órdenes espirituales y
esotéricas, más o menos conocidas, es aquella de apoyar y proteger
un plano de la realidad, de manera que el ser humano y la conciencia
de la Tierra puedan seguir en el camino de la ascensión espiritual,
y que nuestra realidad espiritual y material pueda aunarse a
dimensiones más evolucionadas de la realidad.
EL REINO TEMPORAL
Además de los reinos naturales bien conocidos que
en nuestro plano de existencia son llamados, mineral, vegetal y
animal, tenemos que agregar el reino “temporal” este es un
inteligente ecosistema que interactúa según leyes precisas, con los
reinos del espacio mencionados arriba.
Por supuesto, así
como la mayor parte de nuestra realidad, también todos los fenómenos
relacionados con el tiempo y el reino temporal son restrictivamente
procesados por la percepción humana y la interpretación.
No
obstante, podría ser posible saber e interactuar, a sabiendas, con
los reinos temporales, gracias a un nivel superior de conciencia y
tecnología mágica, como, por ejemplo, el uso de “semillas
temporales” con la cual sería posible orientar flujos de
acontecimientos, accionar en nuevas secuencias autosuficientes,
reconstruir las manifestaciones históricas actuales de la realidad e
incluso dar grandes pasos hacia la creación de lo que es el sueño de
todo alquimista: La Piedra Filosofal.
De esta investigación
ha nacido un nuevo nivel de física pre-quántica y nos ayuda a
profundizar el conocimiento de nuestro Universo.

WORLD = Mundo
Plain of Reality = Plano de Realidad
Temporal Board = Panel
temporal
Space-Time Tissue = Tejido Espacio-Tiempo
En primer lugar
debemos considerar que cada realidad física está hecha por un tejido
de espacio-tiempo, en donde se manifiesta la realidad misma.
Es importante separar el “espacio” considerado como plano
dimensional de formas y desarrollo de acontecimientos, desde el
“tiempo”, que es el apoyo indispensable para la manifestación de la
realidad física.
Imagine, por ejemplo, el tejido fino del
espacio como una grabación, y el tejido fino del tiempo como la
cinta magnética. Donde ya está grabado, podemos escuchar la historia
grabada, que ha estado grabándose continuadamente en el resto de la
cinta. La realidad es todo en uno, con el espacio y el tiempo, que
se combinan para apoyar su manifestación.
Nuestro sentido
interno de la memoria se relaciona con la percepción y la
interacción con el reino temporal, y nos permite a nosotros mismos
percibirnos como criaturas temporales también.
Por ejemplo,
el conocimiento de nuestras vidas “pasadas” no solamente es cuestión
de “buena memoria”, sino que se relaciona con el hecho de que
estamos viviéndolas: deberíamos estar completamente conscientes de
la simultaneidad de nuestra diversificada participación en el
tiempo, en nuestras diferentes encarnaciones.
Somos criaturas
temporales, impregnando el tiempo con nuestra atracción y nuestra
chispa divina. Tenemos algunas raíces (nuestras encarnaciones) en
diversos lugares, en los varios planos materiales posibles. Nuestro
tiempo no es más que los frutos temporales de maduración de
personalidades.
Cada uno de nosotros es una macro-criatura,
que recoge de los mundos materiales, a través de sus raíces, la
linfa vital (en términos de experiencia, complejidad y significado),
la cual alimenta el inmanente y trascendente ser divino.

Soul Structure
enbodied in different time and dimeensions = Estructura del alma
encarnada en diferente tiempo y dimensiones
Individual a-temporal
atractor = Atractor Individual a-temporal
Space/time =
espacio/tiempo
Nuestro verdadero
cuerpo completo se extiende en diferentes espacio-tiempos que se
intersecan, y en todas las dimensiones posibles de complejidad y
conciencia.
Esto es lo que cada uno de nosotros realmente
es.
FÍSICA
ESOTÉRICA Y VIAJE EN EL TIEMPO
¿Qué es un viaje en el tiempo?
En primer
lugar debemos especificar que cuando hablamos acerca de viajes en el
tiempo, no nos estamos refiriendo a una actividad de la perspectiva
del tiempo, tal como una técnica de visión remota, sueño lúcido,
viaje chamánico o una operación adivinatoria1.
Estamos hablando de recorridos del tiempo en el significado exacto
del término, es decir, la posibilidad de moverse a lo largo del
tiempo “histórico”, a fin de interactuar con objetos, gente y
acontecimientos, con el objetivo de causar cambios y para apoyar
secuencias de realidades alternativas o paralelas. Es una
experiencia activa y física.
1 En estos casos nosotros pasivamente
observamos acontecimientos pasados o futuros, a través de facultades
mágicas o extra-sensoriales, sin influenciar o cambiar el curso de
la historia.
Desde el punto de
vista esotérico, si nosotros analizamos la historia de la Magia y
sus mitos, el viaje en el tiempo no es algo nuevo. De hecho, viajar
en el tiempo es considerado una facultad normal ejercitable por
Magos y grandes Iniciados, en concordancia con su nivel de
Conciencia.
En la física esotérica, el punto dominante es la
posibilidad de realizar una tecnología acerca de esta extraordinaria
experiencia, haciéndola accesible a la gente que, aun cuando están
involucrados en un camino iniciático y espiritual, de otra manera no
hubieran alcanzado el nivel necesario de Conciencia para emanciparse
a sí mismos de los límites físicos y sensoriales del concepto
convencional de la realidad.
Los significados de esta
experiencia tecno-mágica van más allá del fenómeno en sí mismo, y se
relacionan con muchas y muy extendidas motivaciones. El conocimiento
progresivo de este panorama puede conducirnos a una extraordinaria e
increíble visión de nuestra realidad y de la historia humana.
-
como misiones de
restauración del fino tejido espacio/tiempo para apoyar
nuestra realidad
-
en un “contexto
de guerra” para oponerse a las fuerzas que están trabajando
en contra de la evolución humana
-
para apoyar
realidades alternativas comparadas con los cursos históricos
ya vividos
-
para crear
segmentos o islas de realidades paralelas a partir de las
cuales se pueden importar efectos a nuestro presente
-
para dar origen a
secuencias históricas de las que podemos o no tener memorias
-
y más…
La preparación
necesaria para convertirse en “tiemponauta” es muy compleja, pero,
en primer lugar, esta experiencia le concierne a gente que ya ha
estado involucrada en un estilo de vida iniciático exacto.
En
términos generales, todos somos viajeros en el tiempo, pues vivimos
instante a instante en esta realidad espacio-temporal en la cual
desarrollamos nuestra historia personal.
No debemos olvidar
que la reencarnación en sí es un verdadero viaje en el tiempo, un
salto en la historia, de tiempo en tiempo, hacia el destino más
adecuado para el crecimiento de nuestra alma.
Sin embargo,
las tipologías del viaje en el tiempo de las que estamos hablando,
están relacionadas con tres metodologías básicas:
-
el verdadero
desplazamiento físico experimentado con el cuerpo
-
el viaje mediante
la posesión, obtenido por técnicas particulares de viaje
temporal-astral, y por poseyendo un cuerpo físico (humano o
animal) que está viviendo en el destino temporal alcanzado
-
y el viaje por
reencarnación programada, para producir y continuamente
apoyar acontecimientos complejos durante todo el lapso de
vida (por ejemplo, podemos pensar acerca de la encarnación
de Avatares quienes llegan a nuestro mundo en tiempos
diferentes para llevar a cabo misiones específicas)
Antes de que
hablemos de aspectos más técnicos, tenemos que hacer alguna
consideración acerca de la estructura del tiempo y de la posibilidad
de interferir con el.
La realidad del espacio-tiempo es el
resultado de una elaboración consensual originada por nuestros
sentidos e interpretada por nuestra mente. Todos los acontecimientos
no-escogidos y las acciones no hechas generan “mundos-eco” que
contienen todas las posibles secuencias no vividas (realidades
alternativas).
Estos “mundos eco” son realidades potenciales
que no son accesibles por nuestro nivel actual de complejidad; por
lo tanto, son llevadas de regreso a un plano único y están excluidas
por nuestra realidad histórica.
Mundos Eco
Cada
vez que hacemos una elección, más o menos intensa, los efectos que
habrían sido las consecuencias de las opciones alternativas
rechazadas, corren lado a lado con la acción concreta que hemos
hecho, en un “mundo eco”. Este eco (o “mundo espejo”) es muy similar
a la realidad actual, sin diferencias significativas, debido a su
corta longitud de tiempo. De hecho, tiende a ser reabsorbido por la
realidad principal, que es formada por el actual plano de
existencia.
Se trata de una realidad “fantasma”, la cual
usualmente no puede producir efectos, y se descompone a sí misma en
leyes.
La realidad genera continuamente mundos eco. Cada uno
de nosotros, debido a nuestra complejidad potencial, flotamos a
través de diversos planos posibles y virtuales, los cuales, no
obstante, son llevados de nuevo hacia una única realidad consensual,
por el mecanismo de nuestra percepción y memoria.
De
hecho, debido a nuestra actual condición limitada, nuestra memoria
determina el plano más significativo que puede ser contenido por
nuestro concepto de realidad, hacia el cual convergen todos los
otros planos posibles. Este plano principal es el que nosotros
llamamos “historia”.
Los mundos eco son las “alas” de nuestro
escenario.
Realmente, estos
mundos eco son absorbidos por el plano principal solamente desde
nuestro punto de vista.
Estos acontecimientos pueden:
Realmente,
permanecen al lado de nuestra realidad, dándole origen a secuencias
virtuales: los mundos eco son insignificantes e inexistentes para
nosotros, pero constituyen la compleja estructura de la realidad
entera.
Cuando viajamos en el tiempo, moviéndonos, por
ejemplo, desde el presente actual hacia el pasado, nos lanzamos a
realidades alternativas: nos encontramos a nosotros mismos en mundos
eco, aparentemente similares al plano histórico ya vivido.
Desde aquí podemos
desencadenar secuencias de acontecimientos, para generar efectos
capaces de interactuar con el plano principal original, y provocar
cambios en el presente.

Travel= Viaje
Echo World= Mundo Eco
Main Plain= Plano principal
Según esta idea
(representada arriba de una manera muy simple), sería posible
consolidar una diferente convención histórica que:
-
crea una
secuencia paralela de acontecimientos que no interactúan con
el plano histórico principal. De todos modos, también desde
nuestro punto de vista, la nueva secuencia tiende a ser
reabsorbida por la original, a través de acontecimientos de
compensación capaces de neutralizar cualquier interferencia
(principio de la resistencia temporal)
-
crea
acontecimientos que pueden ser convenientemente transferidos
desde el mundo eco hacia el presente del plano principal,
sin reestructurar las secuencias intermedias
-
“si es continuamente apoyado 2,
se convierte en el nuevo plano principal, reemplazando al
original (ver más allá “la separación de planos”)
2 Esto es posible
dando origen a secuencias generadoras de eventos autosuficientes o,
en el caso del viaje a través de la reencarnación, viviendo en una
fila en el nuevo plano, en proceso de formación. En todo caso, es
necesario generar acontecimientos de complejidad importante,
comparados con aquellos ya vividos: “gana” el plano más complejo.
No hay paradojas
del tiempo puesto que las acciones hechas en el pasado generan las
consecuencias que están relacionadas con realidades paralelas. Por
lo tanto, el plano de la realidad de que el tiemponauta ha dejado
(que es el plano principal de la realidad histórica) no está
involucrado.
Las causas y efectos no son lineares, sino que
están distribuidas en diferentes planos. La paradoja se debe a
nuestra necesidad de conectar causas y efectos, para darle
significado a la realidad, y elaborar nuestra identidad: el problema
es que solamente nos recordamos de un plano a la vez.
Por lo
tanto, el cambio de la historia no es, en absoluto, automático.
Realmente, debe ser obtenido encontrando la manera de dirigir los
efectos del mundo-eco donde el tiemponauta actúa al plano original.
Por lo tanto, el tiemponauta trabaja en una realidad que no está
consolidada y es diferente, en comparación con la realidad a la cual
volverá.
Por otra parte, lo que nos proponemos cambiar no
puede ser quitado, sino que solamente reubicado en un munco eco,
porque en nuestra lógica causal representa la razón en sí misma que
nos ha conducido a programar el viaje, incluso aunque no estemos
completamente conscientes de ello. En este punto, es obvio que no
podemos seguir usando una lógica linear.
El viajar a través
del tiempo significa ser capaz de investigar los misterios de
nuestra historia humana, para encontrar nuevos significados,
resolver (o crear) enigmas arqueológicos, para explorar reinos no
sospechados de la naturaleza, épocas desaparecidas y de
civilizaciones desconocidas, para correr hacia náufragos viajeros
del tiempo y para encontrar misteriosos vínculos de la aparentemente
conocida historia, así como para descubrir algo más acerca del
increíble cuadro cósmico del cual somos parte.
Un viaje en el
tiempo requiere seguir algunas reglas.
En primer lugar
debemos considerar que con la actual tecnología, solamente es
posible viajar a destinos donde el nivel de complejidad de los
acontecimientos y formas sea inferior, comparado con aquel del lugar
de partida.
De hecho, es normal alcanzar importantes
niveles de complejidad, viviendo instante por instante de manera
linear (según la función de la ley derivada, “Flecha de
Complejidad”, pero en el momento en que queramos “saltar” de un
punto de tiempo a otro, solo podremos alcanzar estructuras con menor
complejidad 3, ya que no podemos entrar donde el nivel de
complejidad todavía no ha sido alcanzado por nuestra evolución
natural.
3 Hacia niveles de complejidad que
ya hemos cruzado durante nuestra evolución.
Según el dibujo, vemos que
es posible viajar solamente hacia el pasado y no hacia el futuro
(teóricamente más complejo), pero cuando hablamos acerca de viajes
más extensos y navegaciones más extensas en el gran mar del tiempo,
preferimos decir, por diversas razones, que nos movemos desde un
presente más complejo hacia una menor complejidad, en vez de hablar
acerca de viajes al pasado o al futuro, porque el tiempo no procede
automáticamente en la dirección de la complejidad.
Por otra parte, es
importante subrayar que cuando hay una diferencia importante de
complejidad, se necesita menos energía para la transferencia:
mientras más reducido es el borde, más energía es necesaria.
Para llegar a tiempos menos complejos significa tener el poder de
imponer, en ese momento, una saturación alternativa de
acontecimientos, gracias a la gran complejidad del tiemponauta.

Arrow of Complexity
= Flecha de Complejidad
Package of Time = Paquete de tiempo
Less complex event = Acontecimiento menos complejo
More complex =
más complejo
En la determinación de la
realidad, los acontecimientos más complejos tienden a prevalecer
sobre los menos complejos.
De hecho, los
acontecimientos pueden ser saturados en diversos niveles de
complejidad. Podemos imaginarlos como “burbujas pulsantes”
dilatándose y contrayéndose, siguiendo un cierto ritmo. Se instalan
en el momento en el cual son saturadas (usadas): el “tamaño” en el
cual se establecerán depende del nivel de complejidad del Ser
saturado. La re-saturación debe ocurrir entrando en el
acontecimiento identificado en contra del tiempo. Es necesario
avanzar al mismo ritmo de ese específico paquete de tiempo.
Por esta razón, el tiemponauta debe ser (o volverse) compatible con
ese ritmo.

Menos complejidad
Más complejidad
El tiempo es como una gran sinfonía
ejecutada por la majestuosa orquesta de la vida, la cual toca con
precisión, siguiendo un ritmo específico.
El tiemponauta
representa un nuevo instrumento nuevo de ensamble, entrando
perfectamente a tiempo en la armonía, pero es capaz de tocar más
fuerte (es más complejo): puede dirigir, poquito a poco, toda la
orquesta hacia variaciones, o puede, incluso, imponer un tema o
ritmo diferente.
A menudo, los tiemponautas son seleccionados
en función a su principal compatibilidad con épocas históricas
específicas (también según sus vidas pasadas), para encontrar la
mejor solución con un mínimo uso de energía.
Otra observación
respecto a los viajes al futuro: si partimos del presente y sabemos
que el futuro no está determinado 4, ¿Cuál futuro es el que
alcanzaremos?
4 El futuro es definido solo en sus posibles
y probables manifestaciones, por lo que es solamente una dirección
virtual.

Presente Absoluto
En teoría sería
posible alcanzar un futuro probable saltando en el reciente pasado
(para tener una mayor perspectiva y “tomar una carrera”) y luego
hacia el futuro más probable (este es un corto mundo eco, el cual no
es paralelo, sino que es proyectado hacia adelante). Las acciones
llevadas hacia el futuro hacen el camino hacia “ese” futuro más
grueso, como si hubiésemos lanzado semillas de acontecimientos o
reservado un camino preferencial.
Esta operación podría hacer
un eventual cambio de camino más difícil, ya que la atracción hacia
“aquel” futuro es más fuerte. Por lo tanto, para evitar problemas en
la gestión de convertirse en realidad es siempre mejor hacer una
perspectiva “pasiva” del futuro (adivinación), porque no afecta en
ninguna dirección.
Realmente, la única posibilidad de viajar
hacia el futuro está relacionada con el uso de las semillas
temporales y sus ramificaciones, puesto que se desarrollan en todas
las direcciones posibles, incluso en nuestro futuro relativo.
Recuerde que no estamos en un absoluto presente, sino en un
plano que está separado de un plano original potencial (separación
de planos).

Relative Present =
Presente relativo
Absolute Present = Presente absoluto
Viaje a través de una
reencarnación programada,
hecho por otras
“fuerzas” con el objetivo de interceptar y neutralizar los efectos
de la Era de Acuario.
Esta posición
particular de nuestro plano de existencia, que se injerta en la
original, hace la gestión de acontecimientos (complejidad/masa) más
flexibles de lo que es posible hacer cerca del presente absoluto,
cuando los acontecimientos son completamente dirigidos hacia su
saturación cronológica y linear.
De hecho, desde una
posición que está lejos del presente que pudiéramos conocer, dentro
de un rango limitado, el mapa del contexto temporal general y las
sedimentaciones de los acontecimientos neutrales (minas temporales).
Para programar un viaje en el tiempo, debemos también considerar
el funcionamiento del ecosistema espiritual del lugar del destino.
Cuando llegamos a cualquier destino temporal, entramos en relación
con las fuerzas Territoriales de ese lugar. Como dijimos
previamente, éstas Fuerzas interactúan con la realidad y, de paquete
en paquete, las estabiliza y las incluye en su dimensión.
Por
lo tanto, cuando entramos a un territorio de acontecimientos que
están saturados en cierto nivel de complejidad, nuestra gran
complejidad nos da el poder de re-saturarlos desde el punto de vista
humano, pero estos mismos acontecimientos han sido también
estabilizados por fuerzas divinas a un diferente nivel, en el cual
no podemos intervenir. Para hacer eso, debemos armonizar nuestra
acción con aquel ecosistema divino, creando un cierto equilibrio
compatible: es necesaria una energía sobrehumana.
Hay dos posibles
soluciones “tecnológicas” (excluyendo el caso en el cual nuestra
Conciencia puede operar.)
-
La primera
solución es estar conectado (iniciado) a un sistema divino
armónico, el cual debe ser temporalmente extendido para
garantizar la sintonía perfecta de nuestras acciones con
todos los ecosistemas temporales.
-
La otra
posibilidad es ser capaz de “usar” la increíble energía de
ese concepto tan altamente espiritual que llamamos, como en
el mito, “GRIAL”.
El Grial es un concepto muy alto,
indefinible e indescriptible en su esencia. En cualquier caso,
podemos imaginarlo como un depósito o reservorio inagotable de
energías divinas.
El Grial existe físicamente, aunque su
forma es mutable. El “tazón” es su arquetipo, pero cambia su forma
según las diferentes situaciones, condiciones y tiempo.
La
identificación del Grial con el recipiente de la sangre de la pasión
del Cristo es un símbolo de la energía que purifica al mundo a
través del sacrificio de Cristo (recuerde que también puede tener
muchas otras interpretaciones.)
El Grial está vinculado con
su imagen, pero es más antiguo que la Cristiandad. Es una parte de
un conocimiento específico, celebrado por antiguas civilizaciones,
incluso por los antepasados de los egipcios. Es como una unidad de
medida, y también es una clave que permite transmutar cualquier
energía hacia cualquier otra.
Esta fuerza es necesaria para todas las
operaciones teúrgicas.
5
5 El Grial no es una Fuerza
evocable, sino que se abre su camino hacia los aspectos más puros
del Ser. Este tópico no será profundizado en este contexto.
Como se ha descrito anteriormente, el Grial
contiene todas las energías y puede convertir cualquier energía en
otra, para permitir cualquier alquimia y transmutación divina
posible. De esta manera, puede armonizar la intervención del
tiemponauta con la divinidad territorial competente.
Cualquier “máquina del tiempo” es un conjunto muy complejo de
laboratorios, templos y equipos que están conectados con toda la
estructura energética del planeta y de nuestro sistema solar.
Desde el punto de vista mágico, un “templo” es una instalación
tecnológica que es usada para varias funciones, investigaciones y
experimentaciones relacionadas con alquimia, misticismo, teurgia,
contacto con fuerzas superiores o internas, salud y operaciones
relacionadas con la física esotérica, como por ejemplo,
transferencias inter-dimensionales y de espacio-tiempo.
Un
templo es auténtico solamente si es rigurosamente promovido y es
mantenido rigurosamente reservado. A menudo, en la antigüedad e
incluso en la historia moderna, muchos templos han sido
transformados en los sitios religiosos, museos o en atracciones
turísticas altamente rentables.
Un verdadero Templo Iniciático es un
crisol de energías divinas cósmicas, telúricas, sincrónicas, físicas
y sutiles, humanas, alienígenas y divinas, y de fuerzas
inteligentes. Es un campo de distorsión dimensional, una “burbuja”
aislada dentro de la cual es posible obtener fenómenos
extra-ordinarios, los cuales trascienden cualquier límite del
espacio-tiempo y entrar en relación con otros niveles de realidad y
con un estado superior de Conciencia. Es un portal espiritual e
inter-dimensional.
Un Templo es un “momento inducido de
atención divina”, una puerta dimensional que ha sido construida para
usar también aquellas peculiaridades geográficas que hacen del
Templo un lugar “sagrado” en correspondencia con nudos sincrónicos
del planeta., Estos son puntos de convergencia entre diferentes
planos y estados del Ser que ponen en relación lo similar con lo
similar, y lo alto con lo bajo.
Estas características
particulares permiten la sedimentación de acontecimientos neutrales
en una verdadera mina temporal desde donde es posible recoger los
acontecimientos necesarios para acciones temporales.
El viaje
físico en el tiempo consiste en mover la información de la
estructura psicofísica del tiemponauta hacia el lugar del destino.
El tiemponauta (un “quántum” de complejidad organizada) no viaja
hacia atrás en una pista de tiempo, sino que, a través de sutiles
simetrías, se va fuera del tiempo para entrar de nuevo en un punto
establecido.
El viaje en el tiempo es siempre un viaje en el
espacio, ya que debemos encontrar y lograr el lugar de destino en su
posición espacial, en el tiempo seleccionado. La posición exacta
puede ser encontrada siguiendo líneas sincrónicas.
No es la
masa del cuerpo la que viaja, sino más bien la información de su
estructura. Los componentes sutiles y espirituales del tiemponauta
no deben ser transferidos: no son temporales y son naturalmente
conmensurados a su información física específica.
Durante la
transferencia, el cuerpo, que es privado de complejidad y
desasociado de la masa, se “derrite”. Su complejidad es
convenientemente empacada y aislada, y enviada al lugar de destino
para “informar” a los átomos y moléculas, (disponibles allí) para
que le den forma de nuevo a todo el cuerpo del tiemponauta. No es la
masa la que viaja, sino la complejidad organizada. El cuerpo físico
se desintegra en una sustancia similar al agua, mientras que en la
destilación temporal programada, el agua es el elemento de donde
parte el reensamblaje del tiemponauta.
Cada
quark
de estructura física del individuo está compuesta de ocho
micro-componentes indivisibles llamados “ladrillos básicos de la
materia”. Un quark puede ser representado por una especie de
Banda de Mobius.
Durante proceso de comienzo del viaje en el tiempo, cada quark es
descompuesto en una estructura de dos-dimensiones y es duplicada.
Todos los “duplicados” – que están embalados como una
compleja y estabilizada información fuera del flujo ordinario del
tiempo, – se combinan con los acontecimientos neutrales, que hacen
la información original como asimétrica, reorientada y enviada a su
destinación final temporal.
Esa información viaja a través
de las líneas de simetría de la realidad, corriendo sobre las
ramificaciones de la vegetación temporal.
Además de la
primera versión de la máquina del tiempo en nuestro laboratorio,
había un estanque que recogía el cuerpo del tiemponauta, disuelto en
forma de agua (privado de su complejidad natural). Hoy en día, esta
operación se realiza mediante la gestión del nivel de humedad de un
espacio determinado.
En los casos de viajes por posesión y
viajes físicos de corta-distancia, la máquina del tiempo puede
gestionar la recepción del tiemponauta en el sitio de destino, así
como en el de su retorno. En caso contrario se necesitan estructuras
precisas de recepción, en el destino final, o incluso en muchas
estaciones intermedias, en caso de que el viaje deba ser dividido en
diferentes tramos.
Instalaciones de recepción pueden ser
construidas ad hoc, por ejemplo, enviando tiemponautas-posesores
solo para construir lo que sea necesario para la recepción física. A
menudo, podemos contar con estructuras ya presentes en algunos
lugares, o en direcciones cuyas civilizaciones terrestres o
extra-terrestres, que ya estén equipadas con una tecnología
compatible.
De hecho, descubrimos varias civilizaciones y
gente que están diseminados a lo largo del tiempo (incluso a través
de una distribución no-cronológica) y que literalmente han
colonizado el tiempo – por muchas diversas razones – como si fuera
un territorio geográfico.
Tuvimos la oportunidad de reunir
muchos mapas temporales y de dibujar nuevos mapas indicando la
posición de los puntos de recepción, estaciones intermedias
(llamadas “castillos temporales”), vórtices y recodos de tiempo,
trampas, sitios misteriosos e inaccesibles, puertas dimensionales y
“estrechos” estratégicos. Estamos descubriendo la morfología del
Tiempo.
Para realmente comprender la mecánica del viaje en
el tiempo, tenemos que considerar la estructura de la materia desde
el punto de vista de la física esotérica.
Los registros
(hechos por la máquina del tiempo) de los códigos de descomposición
y recomposición del tiemponauta comprenden la estructura subatómica
del cuerpo y la complejidad relacionada. Esta es la información –
mantenida dentro de una geometría láser holográfica – que es
enviada. Se sale del plan de existencia y vuelve a entrar en la
destinación seleccionada.
Es importante no confundir la
dirección temporal con la verdadera dirección del Universo, esta es
la distribución de los acontecimientos hacia el resultado de
complejidad.
El punto es que no podemos dar por sentado que
la evolución del tiempo siga automáticamente la evolución ideal de
complejidad. Mientras más complejas sean las formas, más desarrollan
una “libre voluntad”, por lo que tienen el poder de causar acciones
que no están necesariamente en conformidad con la naturaleza de las
leyes: pueden restar valor en vez de acelerar la potencial evolución
global (esto no debe confundirse con el mero progreso tecnológico.)

Temporal secuence =
Secuencia temporal
Los tiempos
“futuros” no corresponden automáticamente a niveles superiores de
complejidad; no obstante, desde el interior, solamente proceden
hacia una progresiva saturación de acontecimientos, desde las causas
hasta los efectos.
Cuando una civilización ser familiariza y
utiliza los viajes en el tiempo, puede desarrollar su historia, no
solo desplazándose en su propio territorio espacial, sino que
también colonizando segmentos descontinuos de tiempo. Para esa
gente, es una evolución coherente, pero distribuida en diversos
territorios temporales no-cronológicos. Este es un “imperio
temporal”. Este concepto se abre a un sentido completamente nuevo de
lo que podrían ser la realidad y la historia.
El tiempo es un
territorio navegable, y es posible crear una verdadera red de
colonias. Por otra parte, gracias al descubrimiento de semillas
temporales, es posible extender los viajes hacia diferentes tiempos
en diferentes planos de existencia y de mundos.
Un imperio
temporal es un reino multidimensional, así como era el Imperio
Estelar Humano: desde aquí, desde nuestra Tierra en este preciso
momento, podemos recomponer verdaderamente esa antigua grandeza
material y espiritual.
Sabemos que el universo continuamente
optimiza su balance para obtener el mejor resultado (nivel máximo de
complejidad) el la mínimo de inversión de energía.
La
Sincronicidad
promueve esta dirección y crea procesos de selección de
acontecimientos y de planos existentes de la realidad.
Debajo
de cierto nivel de resultados, cuando una secuencia espacio-tiempo
no respeta el ángulo de complejidad, basado en el cociente entre
complejidad-función-información, y acontecimientos-que- forman-masa,
se disuelve, se descompone en leyes y es reciclado.
Los segmentos de realidades, e incluso
eras históricas completas pueden repentinamente desaparecer sin
dejar ninguna pista. Las realidades remanentes son naturalmente
conectadas unas con otras por secuencias compensativas de
causa-efecto, las cuales hacen coherente la realidad, sin dar la
posibilidad a ninguna especie perceptiva a ser consciente acerca de
lo que sucedió.
Algunas “islas temporales” sobreviven, en
caso de ser caracterizadas por un nivel de complejidad que está
cortado sobre el promedio de su flujo, y pasa el examen: estas islas
estarán rodeadas por realidades creadas “ad hoc” y capaces de
vincularlas a una de las siguientes secuencias posibles.
Esta
“exploración o escaneo” y “defragmentación” de mundos ocurre
periódicamente y garantiza la optimización de los procesos
existenciales, según el resultado holístico de complejidad
requerido.
En la jerga de la física esotérica, esta clase de
exámenes son llamados “embudos temporales”: imagine un embudo en el
cual esas secuencias históricas (civilizaciones y edades) resultan
ser incongruentes con el ángulo de la caída sostenible de
complejidad. Por el contrario, más allá del embudo, las islas
temporales con complejidad aceptable, sobreviven rodeadas por
realidades re-organizadas en espacios reasignados.
Nadie
puede estar consciente de lo que sucedió; no obstante, alguna
incoherencia arqueológica puede atestiguar algo misterioso.
Según nuestros actuales cálculos, es posible que en aproximadamente
600 años, nuestro plano de existencia tendrá que enfrentar un embudo
temporal.
Nuestra “isla de complejidad” debe, no solo
apoyarse a sí misma en el plano de lo posible, sino que, sobre todo,
unirse a una continuidad evolutiva más allá del frente temporal.
Como ya lo dije anteriormente, no toda esa gente que está
trabajando para la “salvación del planeta” (eso, en cualquier caso,
son conceptos limitados y relativos desde el punto de vista
Telémico) están dirigidos por un verdadero plan evolutivo de
liberación, sino que más bien quieren garantizar la continuidad de
las almas humanas en reproducción, para ventaja de fuerzas opresoras
que viven y se desarrollan en detrimento de la evolución terrestre
humana.
Un punto de no retorno podría ser el
2012,
según muchas antiguas y modernas profecías.
La operación
necesaria es llamada “la búsqueda de la isla temporal”.

¿Cómo es posible
cambiar la historia a través del viaje en el tiempo?
Desde
hace muchos años, hemos estado desarrollando este tópico. Nuestros
descubrimientos e interpretación – incluso del mismo fenómeno – han
sido cambiados según los nuevos niveles de conocimiento y
experiencia.
Los Tiemponautas actúan dentro de una
eco-realidad que corre a la par del plano consolidado de existencia
. Por ello, sus acciones no consideran el proceso histórico desde
donde viene el mismo tiemponauta, y desde donde nosotros
eventualmente queremos causar los cambios, puesto que, básicamente,
el está actuando en otro plano.
Cuando el tiemponauta regresa
al presente, la eco-realidad que él alimentó a través de sus
acciones, saturando eventos precisos, tiende a ser naturalmente
absorbida por el plano principal, y todos los acontecimientos
relacionados están orientados – a través de acontecimientos
compensativos automáticos – hacia los resultados históricos
originales. Sin embargo, si esa eco-realidad es lo suficientemente
compleja y constante o rítmicamente alimentada, entonces puede
persistir al lado del plano original, pero sin interferir
necesariamente con el.
Esto significa que por lo menos un
flujo de acontecimientos pueden volverse lo suficientemente densos,
sobrevivir y unirse a nuestro presente, solo si es lo
suficientemente complejo y es periódicamente alimentado.
Por
ejemplo, esto podría suceder cuando el viajero desencadena un
acontecimiento que es apoyado por el comportamiento natural de la
gente: el puede apilar algunas piedras en el centro de una
encrucijada, lo cual obligará o invitará a los viajeros lejanos a
voltear o agregar otras piedras para construir algo…
Ese
lugar puede convertirse en punto de permeabilidad entre el mundo-eco
y el plano principal; de esta manera, acontecimientos nuevos y
diferentes pueden invadir en el plano histórico.
Ahora, no
puedo listar en este libro toda la información y las variables que
debemos calcular para evaluar si, cómo y cuánto una acción similar
podría afectar la historia y las motivaciones éticas que puedan
justificar esta clase de acciones: así, mantengamos la explicación
solamente en un plano teórico.
Otro método interesante para
provocar cambios históricos es la posibilidad de que el tiemponauta
no haga ninguna absorción o compensación necesaria. Por ejemplo,
haciendo acciones que no pueden interferir con lo que ya ha
ocurrido: construir algo y esconderlo o enterrarlo de modo que nadie
tendrá nada que ver con este objeto en particular.
Ese acontecimiento
puede impregnarse dentro del plano histórico sin realmente
modificarlo (por lo menos durante algún tiempo). De hecho, si el
tiemponauta, una vez haya regresado al presente, tarde o temprano
cava en ese preciso lugar, entonces ese objeto será descubierto:
pero, incluso en este caso, su existencia comienza solamente desde
el momento del retorno del tiemponauta).
La estrategia más
importante respecto a la posibilidad de detectar
acontecimientos-clave es actuando en lo que sea posible para afectar
una larga serie de otros acontecimientos, y crear una reacción en
cadena capaz de ganar peso y caer en el plano original.
Los
acontecimientos-claves no son fáciles de detectar, porque tenemos
que regresar a una serie de causas, independientemente de nuestros
sentidos limitados de causa-efecto e historia. A menudo, un
acontecimiento aparentemente
sin significado es el real
detonador de hechos históricos muy importantes, que parecieran no
tener nada que ver con ello.
Gracias a miles de experimentos,
hemos estado creando un mapa de acontecimientos-clave que están
relacionados con aquellas áreas del tiempo en las cuales estamos
interesados, según nuestro tipo de investigación y trabajo.
A
menudo, apoyando o borrando acontecimientos es un “concurso” en
contra de otras fuerzas operando en contraposición con la humanidad,
con el fin de oponerse a la evolución a cualquier costo.
“Guerras del
Tiempo” son luchadas saturando acontecimientos con la complejidad
más alta posible, para que no puedan ser restaurados por cualquier
otro.
Alimentando o disolviendo secuencias históricas: este
es un concepto muy evolucionado de guerra, y es parte de las
estrategias de la denominada “guerra mágica”, un conflicto que
involucra diferentes planos, mundos, así como inimaginables
dimensiones humanas, alienígenas, sutiles y divinas.
Imaginémonos haber creado alguna interferencia en el plano histórico
que sea capaz de causar cambios en el pasado y en nuestro presente.
¿Podríamos
nosotros estar conscientes de ello?
La respuesta es: “No”.
De hecho, toda la humanidad, incluido el tiemponauta,
inmediatamente sustituye – en la memoria consensual de la especie –
algo que “siempre ha sido de esa manera”, puesto que lo que “era”
nunca fue y es quitado y reemplazado con algo más.
¿Cómo
podríamos estar conscientes de algún cambio? Si no podemos recordar
o conocer una historia que, cuando es reemplazada, jamás ocurrió.
Entonces, ¿qué punto de referencia podemos tener para estar
conscientes de que algo cambió? Básicamente, no es siquiera un
cambio, sino algo que existe a lo largo de todo.
Encontramos
la solución a este problema mediante la construcción de arcas
especiales de memoria, también llamadas “cámaras de compensación
temporal”.
Las Arcas de la memoria son ambientes especiales
(complejos laboratorios aislados del tiempo) en los cuales
“respaldamos” la secuencia historica relacionada con un plano
temporal preciso, tal como está fijado en la memoria humana: es una
imagen del tiempo “presente”.
Estas arcas están fuera del
tiempo, y no son afectadas por las interferencias causadas por el
viaje en el tiempo, y nos permiten medir el desfase entre la
realidad previa y lo que es la realidad una vez que regresa el
tiemponauta.
Es importante destacar que los cambios ocurren
solamente cuando el tiemponauta regresa, y no durante las acciones
que éste está haciendo en el pasado.
Las ramificaciones
temporales son las “vías del ferrocarril” en las cuales los viajeros
se desplazan en el tiempo, para unirse y actuar en diferentes
ubicaciones.
A través de las mismas ramificaciones que usa el
tiemponauta, los efectos que produce se reflejan a sí mismos
directamente en el presente absoluto, sin interferir con la
secuencia intermedia de acontecimientos.
Todas las paradojas
no son nada más que una limitada interpretación subjetiva, pero
relacionada, con esas acciones que son capaces de poner en discusión
los mundos-eco, re-definir cual de ellos debe ser considerado como
un plano principal en comparación con todos los otros posibles, y
enviar solo al “presente” los efectos de este proceso.
Debemos tener en mente que las causas y efectos son distribuidos en
diferentes planos de existencia.
Las ramificaciones
temporales son conductores de acontecimientos, que pueden ser
transferidos a diferentes destinos sin tocar las secuencias
intermedias del plano histórico secuencial.
El objetivo de
los viajes en el tiempo es – consolidar el tejido temporal y
proteger nuestra realidad evolutiva.
La coherencia temporal
restaurada crearía también importantes efectos dentro de nosotros:
por ejemplo, la posibilidad de acceder a memorias relacionadas con
otras vidas, las cuales, de otro modo, serían completamente
excluidas de nuestra posible conciencia.
Esta es una facultad
relacionada con nuestro sentido interno de la memoria, que nos hace
sensibles a nuestras simultánea dilatación a lo largo del tiempo, a
través de aquellas raíces que llamamos “encarnaciones”: algunas de
ellas son cruzadas por medio de la percepción de los sentidos (vidas
pasadas, actuales y paralelas), otras se preparan para ser activadas
según lo que nuestra esencia profunda y trascendente necesita, en
términos de significados y experiencias, para evolucionar y
completar la conciencia del universo.
FUENTE:
http://www.bibliotecapleyades.net/ciencia/time_travel/esp_ciencia_timetravel31.htm